El camión MAN pilotado por Jordi Juvanteny ha terminado la etapa inaugural en 39ª posición, con un crono de 14 minutos y 50 segundos. 

La jornada ha resultado muy especial para Enric González, que debuta en el equipo en lugar de Fina Roman.

Los camiones han causado sensación en la jornada inaugural del Dakar 2013. Tras partir desde Lima y completar los 250 kilómetros de enlace, estos gigantescos vehículos han dejado boquiabiertos a la gran cantidad de espectadores congregados en Pisco, escenario de una especial de 13 kilómetros. El KH-7 Epsilon Team pilotado por Jordi Juvanteny se ha clasificado en 39ª posición.

Gerard De Rooy ha comenzado la edición de 2013 igual que acabó pasada, es decir, en lo más alto del cajón. El holandés del Team Petronas Iveco ha sido el más rápido del día, cubriendo la especial en 8 minutos 46 segundos. Ha aventajado en 16 segundos a su compatriota Hans Stacey, segundo. El podio del día lo ha completado el checo Ales Loprais al volante de un Tatra, a 25 segundos del líder.

El MAN naranja de KH-7 ha marcado un registro de 14 minutos y 50 segundos que le coloca en el 39º lugar de la general, a 6’04” del líder. La etapa ha resultado muy especial para Enric González, que debutaba con el equipo en sustitución de Fina Roman, a quien su trabajo como encargada de la confección del recorrido del Africa Race, junto a Josep Mª Servià, le ha impedido participar por octavo año consecutivo con el piloto Jordi Juvanteny y el copiloto José Luis Criado.

Además de luchar por la victoria en la categoría 6×6, en la presente edición del Dakar los miembros del KH-7 Epsilon Team estrenan la misión de realizar tareas de asistencia rápida al Team De Rooy, principal favorito al triunfo absoluto en el apartado de camiones.

Este domingo, Juvanteny, Criado y González tienen su primera gran prueba de fuego del Dakar 2013, con motivo de la segunda etapa, de 242 km de especial y 85 de enlace por los alrededores de Pisco, sobre un recorrido de dunas muy complicado y bajo un sol abrasador.